España es un país que, por diversas razones, nunca ha tenido en demasiada estima todo lo referente a los géneros. Considerados como segundo plato, cuando no directamente como opio destinado a inculcar la idiotez en ciertos sectores considerados poco cultos, géneros como el Terror, la Fantasía y la Ciencia Ficción han sido en gran medida dejados de lado por las instancias de la alta cultura.
En el caso de la Ciencia Ficción, género por lo general ya muy minoritario, aunque en este país se han dado colecciones de enorme fuste e interés, ésta ha podido ser cultivada por verdaderos espíritus afines al mismo, que han dedicado su arte literario a cultivar la ciencia ficción, aún cuando con ello pudieran ser considerados escritores de segunda o tercera fila.
Como muestra un botón; este monumental "Historia y antología de la Ciencia Ficción española", que supone el número catorce de la colección de volúmenes que componen la colección "Letras populares" de Ediciones Cátedra. Se trata de una compilación que pretende ofrecer una visión amplia de los modos y formas de cultivo que el género ha dado en la Península Ibérica, abarcando desde aproximaciones realizadas a finales del siglo XIX, pasando por las escritas por autores muy actuales, aunque algunos de ellos, caso de César Mallorquí, hayan franqueado la etiqueta de "escritores de género" para abordar propuestas que, a nivel pecuniario les resultan más óptimas, abrazando la literatura de raíz juvenil, donde por fin han ganado premios y reconocimiento, tras años de batirse el cobre.
El volumen parte de un ensayo de los dos compiladores, Julián Díez y Fernando Ángel Moreno, que primero acotan los parámetros genéricos de la Ciencia Ficción para luego hacer un breve repaso histórico a cómo se ha afrontado y hecho Ciencia Ficción por estos lares. Posteriormente, se recogen un total de once relatos, elaborados por otros tantos autores que, como ya he indicado, vienen a dar una panorámica, un gran angular, de este tipo de literatura en nuestro país.
¿Podría haber sido más amplia? No les quepa duda de que sí, pero lo bueno es que el material escogido es de una calidad única y absoluta, un compendio de fábulas que afrontar el género desde prespectivas e intenciones muy diferentes, lo que hace de él un volumen muy rico y disfrutable. Los amantes del género tienen en él un punto de lectura ineludible, y los desconocedores, un libro que se lee con curiosidad y sumo interés. Una obra del todo recomendable.
En el caso de la Ciencia Ficción, género por lo general ya muy minoritario, aunque en este país se han dado colecciones de enorme fuste e interés, ésta ha podido ser cultivada por verdaderos espíritus afines al mismo, que han dedicado su arte literario a cultivar la ciencia ficción, aún cuando con ello pudieran ser considerados escritores de segunda o tercera fila.
Como muestra un botón; este monumental "Historia y antología de la Ciencia Ficción española", que supone el número catorce de la colección de volúmenes que componen la colección "Letras populares" de Ediciones Cátedra. Se trata de una compilación que pretende ofrecer una visión amplia de los modos y formas de cultivo que el género ha dado en la Península Ibérica, abarcando desde aproximaciones realizadas a finales del siglo XIX, pasando por las escritas por autores muy actuales, aunque algunos de ellos, caso de César Mallorquí, hayan franqueado la etiqueta de "escritores de género" para abordar propuestas que, a nivel pecuniario les resultan más óptimas, abrazando la literatura de raíz juvenil, donde por fin han ganado premios y reconocimiento, tras años de batirse el cobre.
El volumen parte de un ensayo de los dos compiladores, Julián Díez y Fernando Ángel Moreno, que primero acotan los parámetros genéricos de la Ciencia Ficción para luego hacer un breve repaso histórico a cómo se ha afrontado y hecho Ciencia Ficción por estos lares. Posteriormente, se recogen un total de once relatos, elaborados por otros tantos autores que, como ya he indicado, vienen a dar una panorámica, un gran angular, de este tipo de literatura en nuestro país.
¿Podría haber sido más amplia? No les quepa duda de que sí, pero lo bueno es que el material escogido es de una calidad única y absoluta, un compendio de fábulas que afrontar el género desde prespectivas e intenciones muy diferentes, lo que hace de él un volumen muy rico y disfrutable. Los amantes del género tienen en él un punto de lectura ineludible, y los desconocedores, un libro que se lee con curiosidad y sumo interés. Una obra del todo recomendable.